martes, 21 de julio de 2009

Ya fue, me voy. Mil puertas se cierran dejando caer. Le pateo cenizas al piso y me rindo frente a mi portón. Voy pensando en que no hace ni un año y las cosas ya no son igual. Las disculpas no cuesta aceptarlas, me cuesta saber perdonar. Y vuelvo a despertar, cansado de estar tan cansado de ser. Me digo no hay mitad que sea tan mala como la que tenés. Y olvido que traigo conmigo canciones y amigo tu alma es ahora mi estrella, el dolor ya no hace mal. Mirando estoy, a veces me toca el silencio total. Porque hay cosas que sangran por dentro y nadie las puede notar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario